BEATOS
SEBASTIÁN NEWDIGATE, HUMFREDO MIDDLEMORE Y GUILLERMO EXMEW
19 de junio
1535 d.C.
Sebastián Newdigate había nacido en Harefield y se
había educado en Cambridge. Contrajo matrimonio y en 1524,
perdió a su esposa. Tenía mucha amistad y predicamento
con el rey, pero advertido por su hermana de las inmoralidades del
monarca, decidió abandonar la corte e ingresó en la
Cartuja, donde profesó y se ordenó sacerdote.
Guillermo Exmew estudió en el Christ's College, en
Cambridge, y se convirtió en un erudito clásico de primer
orden. Al ingresar a London Charterhouse, pronto fue promovido al cargo
de Vicario (sub- prior); en 1534 fue designado procurador. Chauncy
afirma que su virtud y conocimientos no tenían parangón
en toda la provincia inglesa de la orden. Dos días
después de que hubiera sido muerto el Prior de Charterhouse, san
John Houghton, W. Exmew y el vicario, Humphrey Middlemore, fueron
denunciados ante Thomas Cromwell por Thomas Bedyll, uno de los
comisionados reales, por estar "obstinadamente determinados a sufrir
todos los extremos en vez de modificar su manera de pensar" con
respecto a la primacía del Papa.
Tres semanas después, ellos y otro monje de
Charterhouse, Sebastian Newdigate, fueron arrestados y arrojados en
Marshalsea, donde los obligaron a permanecer de pie, encadenados,
atados a postes, y dejados en esa posición durante trece
días. Después de eso los llevaron a la Torre. Incluidos
en la misma acusación que san Juan Fisher, fueron llevados a
juicio en Westminster, el 11 de Junio siguiente, y se declararon
inocentes de los cargos de alta traición, pero reafirmaron su
adhesión incondicional a lo que la Iglesia enseñaba
respecto al tema de la supremacía espiritual y negaron que el
Rey Enrique VIII tuviera derecho alguno al título de
Líder de la Iglesia de Inglaterra. Por consiguiente, se les
condenó a muerte por traidores, siendo ahorcados, arrastrados y
descuartizados. León XIII confirmó su culto el 29 de
diciembre de 1886.