SAN VITALIANO DE CAPUA
699 d.C.
3 de septiembre
El
“Martirologio Romano” nos lleva al 3 septiembre: “Caudii in Campania,
sancti Vitaliani, episcopi”. Esta memoria tomada del “Martirologio
Jeronimiano”, hace pensar que Vitaliano fue un habitante de Sannio, en
la Valle Caudina; la antigua “Caudium” corresponde hoy a la ciudad de
Montesarchio en la vía Appia, situada entre Capua y Benevento.
Estas dos ciudades se apropiaron del santo como su obispo, Capua lo
sitúa en el 25 lugar de su elenco episcopal; nada quita que
también lo haya sido, por algún tiempo, de la
vecina Benevento. Una legendaria “Vita” que fue escrita al fina
del siglo XII, quizás de un clérigo beneventano, con la
intención de reafirmar la consagración del monte
Partenio, llamado después Montevergine.
Vitaliano fue aclamado obispo del pueblo de Capua,
contra su voluntad, pronto fue objeto de calumnias y de vulgares
insinuaciones, de parte de sus enemigos, que no se sabe cómo, lo
hicieron aparecer en público vestido con ropas femeninas y le
acusaron de impudicia. Vitaliano se defendió abiertamente,
desenmascaró a sus calumniadores, después dejó la
ciudad, pero fue capturado, atado a un saco de cuero y arrojado al
río Garigliano; la providencia lo salvó de la muerte y lo
hizo llegar incólume a la costa de Ostia; la ciudad de Capua fue
castigada con sequias, carestía y peste.
Entonces los capuanos se fueron a ver a su obispo,
rogándole que volviera a su sede, pero Vitaliano no quiso y se
retiró sobre el Monte Partenio, donde erigió un oratorio
dedicado a la Virgen y donde murió.
Antes del 716, su cuerpo fue trasladado de Montevergine (Partenio) a
Benevento por el obispo Giovanni, algunos estudiosos dicen que fue en
el 914 a causa de las razzias de los sarracenos.
En el 1122 el Papa Calixto II, transfirió a
Catanzaro el episcopado de “Tres Tabernae”, hizo donación a la
ciudad de las reliquias del santo; creencias de la época
afirman, pero sin fundamento, que las reliquias llegaron de Osimo
(Ancona), creando así el equívoco sobre san Vitaliano,
obispo de Ósimo (sec. VIII), identificándolo con el de
Capua, y que celebran su festividad el mismo día del 16 de julio.
Catanzaro, la ciudad de las tres V (Vento, Velluti,
Vitaliano), venera a san Vitaliano como su patrono principal el 16 de
julio, que es la fecha del traslado de sus restos mortales de
Montevergine a Benevento y después a Catanzaro. El culto de San
Vitaliano obispo, se difundió en la Campania; el famoso
“Calendario Marmoreo” de Napoles, lo recuerda el 3 de septiembre.
Patrón de Capua y de Catanzaro.