Nació en
Tréveris fue educado casi desde la cuna por san Modoardo, obispo
de Tréveris. A los diecisiete años repartió sus
bienes entre los pobres y partió con algunos compañeros
en busca de san Arnulfo, cuyo ejemplo le había conquistado y que
les sugirió que ingresaran en el monasterio que había
fundado con san Romarico. Germán envió a dos de sus
compañeros a buscar a su hermano Numeriano, que era
todavía niño, y juntos ingresaron en el monasterio, que
se hallaba en los Vosgos y recibió posteriormente el nombre de
Remiremont.
Más
tarde,
san Germán pasó con su hermano y otros monjes a la
abadía de Luxeuil, cuando era abad san Walberto. Más
tarde fue elegido primer abad de Granfield en Val Moótier, en
Suiza. Münsterthal o Val Moutier era un paraje montañoso
atravesado por la carretera romana; pero en aquella época los
derrumbamientos de rocas habían cortado el paso. San
Germán abrió nuevamente la carretera y la
ensanchó. Más tarde, gobernó también otros
dos monasterios, el de San Ursitz y el de San Pablo Zu-Werd, pero su
residencia principal siguió siendo Granfield.
Defendió a
los habitantes del entorno del monasterio, de los ataques del duque
Bonifacio que oprimía a los monjes y a los pobres habitantes de
la región con impuestos exhorbitantes y actos de violencia. Un
día en que el duque saqueaba el caserío a la cabeza de un
grupo de soldados, san Germán salió a defender a su
pueblo; el duque le escuchó y le prometió corregirse;
pero, mientras el abad oraba en la iglesia de San Mauricio, los
soldados recomenzaron el saqueo. Viendo san Germán que era
inútil insistir, emprendió el regreso al monasterio
acompañado por el prior Randoaldo; pero los soldados cayeron
sobre ellos, les golpearon y les mataron. Tiene culto local.