SANTOS EUSEBIO,
PONCIANO, VICENTE Y PEREGRINO
192 d.C.
25 de agosto
Las
noticias tradicionales dicen que estos cuatro santos vivieron en Roma
en tiempos del emperador Cómodo (180-192). Se convirtieron a
Cristo y distribuyeron sus bienes entre los pobres; y cuando el
Emperador exigió actos públicos de culto a los dioses
romanos, los cuatro no sólo se negaron, sino que intensificaron
su difusión de la fe. Con su predicación convirtieron a
un senador, Julio, quien también repartió sus bienes
entre los pobres; pero el juez Vitelio lo condenó a muerte.
El grupo de Eusebio recogió el cuerpo de Julio y
le dio sepultura, pero el juez Vitelio se cebó con ellos, los
hizo arrestar y someter a crueles tormentos; luego de algunos hechos
habituales en este género de historias, fueron muertos a golpes
de látigo con puntas de plomo. Sus cuerpos fueron sepultados en
la sexta milla de la Vía Aurelia.