SANTOS DE ANTONIANO Y ASTANCIO DE VIGONZONE
Siglo XI d.C.
25 de agosto

   La historia de Astanzio y Antoniano, se parece mucho a la de los gloriosos Arialdo y Erembaldo y propone de nuevo el esquema hagiográfico de la pareja de mártires unidos en la vida y en la muerte por una solidaridad única en el nombre de Cristo.

   Estamos en el año 1000, cuando la tradición coloca el nacimiento de Astanzio y Antoniano en Vigonzone (una vez en el territorio y en la diócesis de Milán hoy en la provincia de Pavía). No está claro si eran hermanos de sangre, pero seguramente estaban en la fe y la caridad. vivió en familias de fe fuerte, como la de Gervasio y Protasio, y luego se inscribió en el ejército del arzobispo de Milán, Ariberto, en la lucha contra las herejías. A la muerte de Ariberto, sucede Giudone "de raza innoble y plebeya", que comenzó a dar fuerza a las represalias heréticas que devastó la diócesis de Milán. Precisamente en estas luchas sucumbieron ante Porta Romana, donde se habían apresurado a apoyar a dos amigos para defender una iglesia de la profanación. Inicialmente los cuerpos sagrados fueron depuestos por el sacerdote Eriberto y el diácono Lieto en San Dionigi. Luego, después del funeral, fueron solemnemente transferidos a Vigonzone.

   Después de un período de pérdida de memoria, el culto florece de nuevo en 1151. En 1185 el Papa Eugenio III reconoció el culto. Sus cuerpos, sin embargo, fueron reportados a Milán, en San Satiro, como un castigo, después de un evento sacrílego operado por Massazio di Vigonzone. Solo en 1802 los cuerpos sagrados regresaron a Vingonzone, donde son reverenciados como ilustres ciudadanos y mártires el 25 de agosto.

   Los dos santos representan de manera simple pero concreta la solidaridad de la fe que vence al mal y defiende de las herejías, por lo tanto, son mártires y modelos de caridad. Los milagros que se les atribuyen hablan de obras de reconciliación y pacificación, invocadas para mantener amistades firmes que traen la paz a las familias.  

Página Principal
(Parroquia San Martín de Porres)