SANTA PATRICIA DE
CONSTANTINOPLA
665 d.C.
25 de agosto
Nació en Constantinopla. Fue educada en la corte, y siendo muy
joven hizo voto de virginidad. Para poder permanece fiel a éste,
huyó de la ciudad porque el emperador Costante II (668-685)
quería imponerle matrimonio.
Llegó a Roma junto con Aglaia y otra joven y se puso bajo la
protección del papa san Liberio, recibiendo el velo virginal.
Muerto su padre, Patricia volvió a Constantinopla y renunciando
a toda pretensión a la corona imperial, distribuyó
sus bienes entre los pobres y emprendió una peregrinación
a Tierra Santa. Pero una terrible tempestad la hizo naufragar en las
costas de Nápoles, justamente en la islita de Megaride (Castel
dell’Ovo), donde murió después de una brevísima
enfermedad.
Por celeste revelación de Aglaia, los funerales de
Patricia se hicieron de forma solemne con la participación del
obispo, del duque de la ciudad y de muchísima gente. El carruaje
tirado por dos caballos sin guía, detuvo la marcha delante del
Monasterio de Caponapoli de los Padres basiliani, dedicado a San
Nicandro y Marciano, donde Patricia, al pasar por Nápoles en su
precedente viaje a Roma, había indicado que reposarían
sus restos. Allí, las hermanas que la habían seguido,
formaron una congregación bajo el nombre de Patricias o Hermanas
de Santa Patricia.
El monasterio, trasferido por los monjes basiliani,
quedó para las hermanas bajo la regla benedictina y tuvo varios
siglos de vida gloriosa. A causa de eventos históricos y
políticos, en 1864 las reliquias de la santa fueron trasladadas
al monasterio de San Gregorio Armeno, en la capilla lateral de la
monumental iglesia del monasterio.
La población siempre acude a venerar a la Santa,
asistiendo estupefacta al prodigio de la licuefacción de la
sangre que mana de un diente conservado en un relicario. Durante varios
siglos, la licuefacción de la sangre sobrevino con modalidades y
tiempos diversos. Este milagro es menos conocido que la otra
licuefacción que hay en Nápoles, la de San Jenaro,
patrono principal dela ciudad. Es la segunda patrona de Nápoles.