SANTA MARINA DE OMURA
11 de noviembre
1634 d.C.
Nacida
en Ômura, brilló por sus virtudes y devoción y en
la ayuda de los misioneros perseguidos. Tuvo como director espiritual a
san Luis Bertrán que la inscribió en la Tercera Orden de
Santo Domingo. Los biógrafos la describen como "ejemplo para
todos los cristianos de Ômura". Su casa era refugio de misioneros
y cristianos y lugar donde se celebraba la Eucaristía y se
administraban los sacramentos. En palabras del padre Jordán "era
la más valerosa y santa mujer que ha tenido Japón".
Hacia el 1625, emitió voto de virginidad. Las autoridades
seguían sus pasos y en 1634, fue arrestada. Confesó su fe
y que su casa era lugar de alojamiento de misioneros y cristianos. La
sometieron a diversos tormentos: la pasearon desnuda por todos los
pueblos del pueblo de Ômura; luego fue trasladada a Nagasaki y
condenada a morir en la hoguera, junto con los padres los santos
Jordán Ansalone de San Esteban y Tomás Hyoji de San
Jacinto y otos 68 cristianos. Murió perdonando a sus verdugos y
sus cenizas fueron arrojadas al mar.