SANTA JUANA JUGAN
(MARÍA DE LA CRUZ)
1879 d.C.
29 de agosto
Nació en Petit Croix, Cancale (Bretaña francesa). La casa
de Juana era muy pobre, el padre era pescador de bacalao, y lo
perdió muy pronto. A los 16 años se colocó de
ayudante de cocinera en una familia de los alrededores. Ingresó
como miembro de la Orden Tercera del Admirable Corazón de
María de san Juan Eudes, donde fue adquiriendo experiencia
religiosa. A los 25 años, fue a Saint-Servan, y durante seis
años sirvió a 300 niños pobres; aquí
cambió su verdadero apellido Joucan, por Jugan. Trabajó
como enfermera en el hospital del Rosais. En 1823 pasó al
servicio de la señorita Lecoq, con quien vivió doce
años como amiga y colaboradora, dedicándose a visitar a
los pobres y educar a los niños. Muerta su amiga, Juana
alquiló una casa en Saint-Servan con su amiga Francisca Aubert.
Aquí en el invierno de 1839, la anciana Anne Chauvin, ciega y
paralítica, pidió y obtuvo asistencia. Desde aquel
momento Juana tuvo clara la misión que Dios le confiaba;
dedicarse a los ancianos pobres.
A la edad de 32 años, se juntó con algunas
mujeres en comunidad y empezó a recibir en su casa algunos
ancianos abandonados. Desde entonces tuvo que salir a pedir para los
pobres que estaban recogidos en su casa. La obra fue aumentando; su
oficio era ser buscadora de pan. Juana empezó a tener fama por
su heroica entrega a los más pobres. En la Academia Francesa se
habló de ella; en 1845 le concedieron el premio Montyon,
destinado a un francés pobre, autor de la acción
más virtuosa. Los periodistas la sacaban en sus reportajes.
Empezaron las nuevas fundaciones en Rennes y Tours. Los parlamentarios
hablaban en las Cortes de ella: "Juana Jugan es un personaje que sabe
de socialismo más que todos ustedes juntos". Luego fundó
en París, Besançon, Nantes y Angers. En Nantes se las
empezó a llamar "las Hermanitas de los Pobres", que Juana
elaboró una regla basada en la de los Hermanos de San Juan de
Dios. A los tres consejos evangélicos añadieron el voto
de hospitalidad. más tarde se abrió la primera casa en
Inglaterra, en las afueras de Londres.
Sus compañeras la eligieron como superiora. Pero
pronto Juana será destituida de una manera arbitraria. A la
injusticia Juana respondió con el silencio, la bondad, el
abandono. En el transcurso de los años la sombra que
envolvió a Juana fue ordenado cada vez más densa, se
dedicó al oficio de simple limosnera. Se dio una falsa
interpretación de los comienzos de su obra. Cuando murió
en Tour Saint Joseph, había 2.400 hermanitas que
repartían pan y amor entre los ancianos más pobres y
abandonados, pero pocas sabían que ella era la fundadora, pero
su influencia junto a las jóvenes con quiénes
había compartido la vida durante 27 años fue decisiva.
Este contacto prolongado hará que el carisma inicial, y el
espíritu de los orígenes fuera transmitido. A partir de
1900 comenzó a descubrirse la verdad: Juana Jugan -sor
María de la Cruz- muerta en el olvido fue la primera Hermanita,
era la fundadora. Fue beatificada `pr SS Juan Pablo II el 3 de octubre
de 1982 y canonizada por SS Benedicto XVI el 11 de octubre de 2009.