SANTA GÚDULA
8 de enero
712 d.C.
Nació en Brabante en el seno de una familia noble. Hija de
Witger, duque de Lorena y santa Amelberga de Maubeuge. Hermana de
santos Reinelda y Ableberto. Se educó en el monasterio de
Nivelles bajo la dirección de su madrina, santa Gertrudis, hasta
la muerte de ésta en el 659. Volvió a su casa en Durme
(Alost), consagrando su virginidad y dedicándose a toda clase de
obras de caridad. Según unos, vivió recluida en el
oratorio de San Salvador de Moorsel, a pocas millas de su pueblo natal.
Según otros, permaneció en casa de sus padres, llevando
una vida extraordinaria de piedad y recogimiento.
Volviendo un
día de la capilla de Moorsel, encontró a una pobre mujer
que llevaba en brazos un niño de diez años
paralítico de pies y manos. Gúdula lo tomó en sus
manos, lo acarició y rogó fervorosamente a Aquel que
dijo: "Todo lo que pidiereis a mi Padre en mi nombre os lo
concederá". Inmediatamente el niño se sintió
curado y comenzó a dar saltos de alegría. En otra
ocasión vino a su encuentro una leprosa llamada Emenfreda. La
santa examinó sus llagas, la consoló con dulces
pensamientos y después la curo. La noticia de estos prodigios se
extendió rápidamente por toda la región. Y una
multitud de desgraciados acudía a ella en busca de socorro. A su
muerte un cortejo de pobres se unió, alabando su caridad.
Es
famosa la anécdota que salía por las noches a rezar,
acompañada de una vela, y Satanás, se la apagaba para
distraerla de la oración, pero la fuerza de su oración,
hacía que se volviera a encender. Sus restos enterrados en la
iglesia de Saint-Michel de Bruselas, fueron dispersados en 1579 a
raíz de un saqueo de la colegiata por los calvinistas. Patrona
de Bruselas. Tiene culto local.