SANTA EMERENCIANA
23 de enero
304 d.C.
Hermana de leche de san Inés, se cree que tenía entre 13
o 14 años. Era todavía catecúmena y cuando estaba
rezando, en la vía Nomentana, delante de la tumba de santa
Inés fue lapidada allí mismo, dos días
después; según otra versión la habrían
abierto el vientre. En realidad esta santa es una mártir romana
muerta en fecha desconocida.
Las reliquias de Emerenciana fueron trasladadas en el siglo IX a la
Basílica de Santa Inés. Pablo V, en 1615, ordenó
una artística caja de plata, en la cual colocar los cuerpos de
las dos santas, y que fue puesta bajo el altar mayor. Otras iglesias en
Roma han conservado el recuerdo de la mártir: Santa Inés
de Plaza Navonna, donde le fue dedicado un altar en 1120; San Pedro In
vincoli, donde estaría conservada la cabeza; Santa María
en Campitello, donde se exhibe un dedo suyo. En España, Alemania
y Bruselas hay tradiciones de que se conservan reliquias suyas. Algunas
leyendas tardías complicaron el relato del martirio contando que
había sido torturada en el vientre, por lo que, especialmente en
Francia, se la invocaba para dolores de vientre. Su culto desde 1969 se
ha limitado a los calendarios locales. Patrona de Teruel.