3 de enero
Siglo VII d.C.
Santa Bertilia (Bertille o
Bertilla) es una reclusa que vivió en el siglo. VII. Se cree que fue
una mujer muy piadosa y caritativa de origen franco, hija de Ricomero y Gertrudis,
señores de los Atrebates. Tras la muerte de su marido, el noble Gutland,
tal vez un señor de Auvernia, al no tener hijos, decidió distribuir
todos sus bienes entre los pobres de la Iglesia, manteniendo sólo un
hogar modesto y viviendo en continua oración.
Bertilia decidió vivir su vida reclusa en Marœuil-lex-Arras, en la región de Hauts-de-France, junto a la iglesia de Saint Amando, que había construido en su honor después de vender todas sus propiedades. Cuenta la tradición que durante una fuerte sequía, Santa Bertilla, después de orar con los campesinos, golpeó el suelo con su bastón y provocó que brotara un manantial de agua.
Sabemos que a su muerte, ocurrida a finales del siglo VIII, (687 o 697) Bertilia fue enterrada en la iglesia de Sant'Amando. Respecto a sus reliquias, sabemos que su elevación tuvo lugar en 1081 y su traslado en 1288. Las reliquias de la Santa fueron objeto de culto gracias a los numerosos milagros ocurridos en su tumba. La fiesta de Santa Bertilia se ha fijado para el 3 de enero.
Bertilia decidió vivir su vida reclusa en Marœuil-lex-Arras, en la región de Hauts-de-France, junto a la iglesia de Saint Amando, que había construido en su honor después de vender todas sus propiedades. Cuenta la tradición que durante una fuerte sequía, Santa Bertilla, después de orar con los campesinos, golpeó el suelo con su bastón y provocó que brotara un manantial de agua.
Sabemos que a su muerte, ocurrida a finales del siglo VIII, (687 o 697) Bertilia fue enterrada en la iglesia de Sant'Amando. Respecto a sus reliquias, sabemos que su elevación tuvo lugar en 1081 y su traslado en 1288. Las reliquias de la Santa fueron objeto de culto gracias a los numerosos milagros ocurridos en su tumba. La fiesta de Santa Bertilia se ha fijado para el 3 de enero.