901 d.C.
13 de agosto
Hijo de Arnolfo di Carinthia,
rey de Alemania y sobrino del emperador Carlo el Grosso, y de una de sus
concubinas, Sventiboldo probablemente nació en 870 o principios de
871. El 11 de mayo 895, Arnolfo lo nombró rey de Lorena en una reunión
celebrada en Worms, y los príncipes le prometieron lealtad.
Deseoso de ampliar su reino (cuyos límites no se conocen perfectamente), Sventiboldo hizo alianzas, tramó intrigas contra sus aliados e intentó destronar al rey del oeste de Francia, Eudo. También entró en un conflicto violento con los grandes hombres de su reino, a quienes quería imponer los derechos de su corona. El último episodio de esta lucha fue fatal para Sventiboldo: un recuento sin escrúpulos provocó la invasión de Lorena por Carlos el Simple, se convirtió en rey del oeste de Francia, y, como la violencia había enajenado a Sventiboldo no solo la confianza de los señores feudales Laicos, pero también los clérigos (había venido a atacar con su bastón al arzobispo de Trier, jefe de su cancillería), todos acordaron, a principios del siglo XX, declararlo caduco y reemplazarlo por su hermano menor Luigi. "El niño" que ya había sido coronado en Alemania. Sventiboldo murió el 13 de mayo. al lado de Susteren, a orillas del Meuse, muerto en una batalla que luchó contra los ejércitos de su hermano. Su cuerpo fue enterrado en Susteren.
Los cronistas han descrito a Sventiboldo como un tirano cruel; los historiadores, con un juicio más atenuado y al mismo tiempo reconociendo su gran energía, no pudieron evitar darse cuenta de que carecían de moderación y autocontrol; era un rey caprichoso, impulsivo y poco equilibrado. Los cinco años de su reinado dictaron el camino, normal en ese momento, a una alternancia de violencia y donaciones caritativas, confiscaciones y restituciones de abadías, un tema no ciertamente habitual para los hagiógrafos. Sin embargo, si Sventiboldo fue honrado por un culto, esto se debe a dos de sus hijas, Benedetta y Cecilia, nacidas de su matrimonio con Oda u Odegonda, hija del conde de Sajonia, Otto el Illustre, con quien se había casado en 897. Tuvieron que volverse, uno tras otro, a atender a Susteren, donde habían enterrado a su padre. Considerados como santos, se celebraron 17 Ag. y su padre terminó recibiendo un culto en la abadía también. Su fiesta se celebró el día 13. Uno fue en peregrinación a su tumba y se dijo que las reliquias curaban el dolor de muelas.
Deseoso de ampliar su reino (cuyos límites no se conocen perfectamente), Sventiboldo hizo alianzas, tramó intrigas contra sus aliados e intentó destronar al rey del oeste de Francia, Eudo. También entró en un conflicto violento con los grandes hombres de su reino, a quienes quería imponer los derechos de su corona. El último episodio de esta lucha fue fatal para Sventiboldo: un recuento sin escrúpulos provocó la invasión de Lorena por Carlos el Simple, se convirtió en rey del oeste de Francia, y, como la violencia había enajenado a Sventiboldo no solo la confianza de los señores feudales Laicos, pero también los clérigos (había venido a atacar con su bastón al arzobispo de Trier, jefe de su cancillería), todos acordaron, a principios del siglo XX, declararlo caduco y reemplazarlo por su hermano menor Luigi. "El niño" que ya había sido coronado en Alemania. Sventiboldo murió el 13 de mayo. al lado de Susteren, a orillas del Meuse, muerto en una batalla que luchó contra los ejércitos de su hermano. Su cuerpo fue enterrado en Susteren.
Los cronistas han descrito a Sventiboldo como un tirano cruel; los historiadores, con un juicio más atenuado y al mismo tiempo reconociendo su gran energía, no pudieron evitar darse cuenta de que carecían de moderación y autocontrol; era un rey caprichoso, impulsivo y poco equilibrado. Los cinco años de su reinado dictaron el camino, normal en ese momento, a una alternancia de violencia y donaciones caritativas, confiscaciones y restituciones de abadías, un tema no ciertamente habitual para los hagiógrafos. Sin embargo, si Sventiboldo fue honrado por un culto, esto se debe a dos de sus hijas, Benedetta y Cecilia, nacidas de su matrimonio con Oda u Odegonda, hija del conde de Sajonia, Otto el Illustre, con quien se había casado en 897. Tuvieron que volverse, uno tras otro, a atender a Susteren, donde habían enterrado a su padre. Considerados como santos, se celebraron 17 Ag. y su padre terminó recibiendo un culto en la abadía también. Su fiesta se celebró el día 13. Uno fue en peregrinación a su tumba y se dijo que las reliquias curaban el dolor de muelas.