SAN SEVERINO DE
SETTEMPEDA
15 de mayo
550 d.C.
Las pocas noticias que tenemos provienen de una «Vita»
escrita entre el VII y el IX siglo, reescrita en una redacción
tardía que amplía y llena de episodios el antiguo texto,
ya de por sí legendario, a costa de la verdad histórica.
Nació en el seno de una noble familia cristiana. Severino y su
hermano san Victorino distribuyeron su fortuna entre los pobres y se
hicieron ermitaños en el monte Nero, pero en el 544, el Papa
Vigilio les obligó a ser obispos, el primero de
Settémpeda en la Marca de Ancona, y el segundo de Camerino.
Severino murió antes de que se sede fuera destruida por los
ostrogodos de Totila. Sus restos se encuentran en la catedral de
Settémpeda. Patrón de Settémpeda (hoy San Severino
Marche).