SAN PETROCO DE GALES
4 de junio
594 d.C.
Nació en Gales, Gran Bretaña, siendo el menor de los
hijos (en otros santorales dice que era el hermano) del rey san Gundleo
de Glywysing (la actual Glamoran). Las sagas cuentan que a la muerte de
su padre, la gente de Glywysing quería que Petroc asumiera el
trono, pero él rechazó la oferta, pues había
decidido seguir su vocación religiosa, de modo que se
marchó a estudiar a Irlanda y fue monje de la abadía de
Bangor.
Después de varios años Petroc regresó
a Gran Bretaña, entrando a Cornualles, en la parte suroccidental
de la isla, por el río Camel. Ahí conoció a un
ermitaño, san Guetnoco, quien le cedió su celda para que
fundara un monasterio en ese lugar, llamado Llanwethinoc. Allí
fundó un monasterio llamado Petrocston (Padstow).
Permaneció como abad durante 30 años.
Después de ese tiempo realizó una
peregrinación a Roma. Al regresar, casi al llegar a la isla,
comenzó a llover, y Petroc predijo que escamparía pronto.
Sin embargo, la lluvia se prolongó por más de tres
días. Como penitencia por haberse atrevido a vaticinar el clima
de Dios, Petroc regresó a Roma, y de ahí marchó a
Tierra Santa y más allá, hasta la India, donde
vivió durante siete años en una isla.
Tras largo tiempo Petroc volvió de nuevo a Gran
Bretaña acompañado por un lobo que había sido su
compañero en India. Ahí se retiró a vivir como
ermitaño en los bosques de Nanceventon. Cierto día, un
venado herido buscó refugio con Petroc, quien lo protegió
de su cazador, el rey san Constantino de Dumnonia. Al intercambiar
palabras con él ambos encontraron buena comunicación, en
tal grado de que Petroc terminó convirtiendo a Constantino al
cristianismo. Con apoyo de este rey de Dumnonia, Petroc fundó un
monasterio llamado Bothmena, o Abadía de Monjes, en el sitio
donde se encontraba la ermita.
Falleció al encontrarse en uno de sus viajes; fue
enterrado en Padstov y posteriormente sus restos fueron trasladados al
monasterio de Bothmena. Tuvo como discípulos a Santos Croidan,
Medán y Degán, que se veneran con él el mismo
día. En Bretaña se le venera con el nombre de Perreux. Es
uno de los patronos de Cornualles.