SAN PATERNIANO DE FANO
12 de julio
343 d.C.
Nació en Fan, Italia. Mientras arreciaba la persecución
de Diocleciano una visión angélica le aconsejó
dejar la ciudad; así lo hizo, yéndose al desierto, en
donde vivió como ermitaño. Más tarde, cuando
cesaron las persecuciones y el Cristianismo se convirtió en la
Religión del estado con el emperador Constantino, los ciudadanos
de Fano reclamaron como obispo al virtuoso eremita que tenía
fama de santo.
En vano trató él de oponerse, finalmente "casi a viva
fuerza" fue llevado a la ciudad. Gobernó la diócesis
durante 42 años aplacando los ánimos, istruyendo y
confortando. Los paganos, atraidos por su predicación,
abandonaron los ídolos y destruyeron los templos
uniéndose al santo obispo. El Señor avaló su celo
con muchos prodigios.
Advertido de su inminente fin, emprendió una visita a toda la
diócesis. Murió en la periferia de la ciudad. Sobre su
sepulcro se multiplicaron los prodigios y su culto se extendió
rápidamente en toda Italia. Sus reliquias se veneran en Fano, en
la basilica a a él dedicada.