SAN PALMERIO
8 de julio
303 d.C.
Sardo
de nacimiento, quizás de la actual provincia de Oristano. Era de
estirpe noble y un militar de la guarnición. En tiempos del
emperador Diocleciano, se convirtió al cristianismo, llegando a
ser neófito y propagador de la fe. Descubierto, fue exiliado al
norte de Cerdeña, en la actual Villanova Monteleone (Sassari),
cerca de la sede del juez de Torres. Aquí después de
recibir el bautismo, llevó vida eremítica. Al final fue
acusado y llevado ante un tribunal romano y después de ser
flagelado, fue asesinado. Es el patrón de los pueblos de
Ghilarza y Bortigali (Nuoro, Cerdeña) y tiene culto local.