SAN NICECIO DE BESANCON
8 de febrero
611 d.C.
Obispo
de Besançon; amigo de san Columbano de Bobbio. Trasladó
de nuevo a Besançon la sede episcopal que después de la
invasión de los bárbaros había sido transferida a
Noyón. Se conocen poquitísimos datos sobre
san Nicecio y su actividad episcopal en una ciudad y en una provincia
que fatigosamente comenzaba a reconstruirse luego de la
ocupación de las tribus alamanas. Los textos hablan de su
talento oratorio y de su gran caridad. Según algunos
historiadores, habría participado en el 602 en un concilio cuyas
actas se han perdido. Uno de los catálogos episcopales lo indica
como décimo sexto obispo de Besançon, y añade que
fue contemporáneo y amigo del papa san Gregorio Magno. Sobre ese
mismo catálogo una mano posterior agregó que
construyó en la ciudad episcopal la iglesia de San Pedro.
Durante su episcopado,
en el territorio de la diócesis san Columbano organizaba su
monasterio de Luxeuil. Nada impide creer que los obispos de
Besançon, entre los cuales estuvo Nicecio, se hayan mostrado
más que reticentes frente a las libertades que se tomaba san
Columbano, en especial en el conflicto por la celebración de la
Pascua. Los obispos de la región recelaban de las costumbres y
ritos irlandeses que había traído san Columbano, y en el
602 lo llamaron a juicio, pero el santo no acudió, y se
limitó a pedirles por carta que se ocuparan de problemas
más importantes.
Nicecio murió con toda probabilidad hacia el 610, y fue
sepultado en la iglesia de San Pedro. Su nombre fue inscripto en el "Martirologio
de Besançon", y en las letanías de la
diócesis. Hoy la diócesis de Besançon la festeja
el 8 de febrero, con oración propia. Le están dedicadas
tres parroquias, respectivamente en la diócesis de
Besançon, de St-Claude y de Angerans, donde en un tiempo fue
especialmente festejado. Tiene culto local.