SAN MELANIO DE RENNES
6 de noviembre
540 d.C.
Nació en Bretaña e ingreso en los benedictinos. Amando le
designo su sucesor como obispo de Rennes (Francia), en el
período crítico en el cual los francos invadieron la
Galia; parece que fue capaz de extirpar la idolatría de su
diócesis. Vivió y pasó esta vida con "la vista
fija siempre en el cielo". Las virtudes más
características del santo eran la humildad y el espíritu
de oración. Construyó con sus propias manos una iglesia
en Placio, donde congregó monjes y donde murió. El rey
Clodoveo tuvo siempre un gran respeto por él. En el 511
participó en el concilio de Orleans, donde tuvo un papel
preponderante.