SAN JOSÉ VAZ
16 de enero
1711 d.C.
Nació en Benaulin. Estudió en la universidad de Goa y fue
ordenado sacerdote en 1676. Quería ser misionero y
predicó en la zona de Kanara con gran celo y fruto
apostólico. Deseoso de vida en común y de vivir su
sacerdocio en los cauces señalados por san Felipe Neri,
fundó un oratorio filipense en Velha Goa, del que fue el primer
prepósito y que se consolidó bajo su dirección.
Marchó a la
isla de Ceilán en la que se padecía una fuerte crisis:
los holandeses al conquistar la isla habían expulsado a los
sacerdotes católicos de la isla con el fin de prostentantizar
las comunidades cristianas existentes. La Compañía de
Indias había amenazado con la muerte a cualquier sacerdote
católico que quisiera misionar la zona. José Vaz se
infiltró clandestinamente en Ceilán y allí
desarrolló una eminente labor apostólica entre las
comunidades católicas. Marchó al interior de la isla, al
reino de Kandy, que había conservado su autonomía, a
pesar de la presencia holandesa. Localizado como extranjero fue
detenido, pero se conquistó el respeto del rey que le dio
licencia para que actuase libremente por su reino. Esto dio
ocasión a que tuviera muchísimos frutos
apostólicos.
Hizo venir de Goa una comunidad de filipenses, a la que se le
encomendó la evangelización de la zona, logrando una
cristiandad, a su muerte de cien mil fieles. Tradujo el catecismo al
cingalés, adoptó los usos y costumbres locales,
adelantándose a la inculturación del evangelio del
concilio Vaticano II. Mantuvo un diálogo leal y sincero con los
budistas. En una epidemia de peste estuvo al lado de todos, sin
distinción distinguiéndose por su caridad. Consumido por
el trabajo murió e Kandy. El Papa Francisco lo ha
canonizado el 14 de enero de 2015.