SAN JOSÉ DE
TESALÓNICA
15 de julio
832 d.C.
Nació en Constantinopla, en el seno de una familia de la
nobleza. Hermano de San Teodoro Estudita. En el 781, bajo la influencia
de su tío Platón, abad de un monasterio en Bitinia, toda
la familia abrazó la vida religiosa. El padre se retiró
con sus hijos varones a una propiedad familiar en Sakoudion, en el
monte Olimpo. Cuando en el 795, Constantino VI repudió a su
mujer legítima para casarse con otra, estos monjes se opusieron
al matrimonio y por ello fueron exiliados. La llegada al poder de
Irene, garantizó un período de tregua a los monjes, que
entre el 798 y el 799, tras las incursiones árabes, se retiraron
al monasterio de Stoudios en Constantinopla. José se
encontró entre estos monjes, mientras su hermano fue elegido
hegúmeno.
En el 806 fue nombrado arzobispo de Tesalónica, y en el
sínodo del 809, al negarse a aceptar el matrimonio del
emperador, por no estar bendecido por la Iglesia, fue de nuevo exiliado
junto a su hermano y su tío Platón. Fueron de nuevo
rehabilitados por el emperador Miguel I Rangabe, en el 811, pero con el
advenimiento de León V el Isaúrico, y la lucha
iconoclasta, José, al negarse a defender la herejía, fue
deportado a una isla en el 815. Un nuevo emperador, Miguel II, les
devolvió la libertad. Pero tuvo que sufrir un cuarto exilio con
el emperador Teófilo, a causa de la iconoclastia, y murió
en el exilio de Tesalia agotado. Fue un gran defensor de la ortodoxia y
escribió algunas obras poéticas y oratorias. José
representa al monje, que defiende la libertad religiosa, frente a la
ingerencia de los poderosos, el culto divino y, en particular, las
imágenes, consciente de poder afrontar con ello el
martirio.