SAN GERARDO DE BROU
29 de mayo
940 d.C.
Natural de
Bélgica. Benedictino de Cluny, fue elegido obispo de
Mâcon, Francia y consagrado por san Aureliano de Lyon; 40
años después de un episcopado lleno de contrariedades por
la lucha que tuvo que mantener con los señores borgoñones
para defender los derechos de la Iglesia; desalentado dejó su
sede para morir en Bourg-en-Bresse, donde fundó el monasterio
cluniacense de Brou. Sus restos fueron trasladados a la iglesia de
Saint Pierre de Mâcon. Su fama de santidad perduró de
manera constante en la región, y su tumba fue meta de
peregrinación.