SAN FRANCISCO ANTONIO
FASANI
29 de noviembre
1742 d.C.
Antonio Fasani, nació en Lucera (Puglia), y se llamaba Juan. Muy
joven se hizo franciscano conventual, en el convento de Lucera,
adoptando el nombre de Francisco Antonio. Hizo su profesión
religiosa en 1696. Completó sus estudió
filosóficos y teológicos en el Estudio General de Asis
donde fue ordenado sacerdote a los 26 años (1705).
Exímio
predicador y maestro de Teología, pasó sus años de
intensa vida apostólica en Asís, Roma y Lucerna (en su
ciudad natal pasó casi toda su vida). En la escuela, en el
púlpito y en el confesionario desplegó un fecundo
apostolado, sobre todo en su región de origen. Por sus dotes de
maestro de novicios y predicador fue llamado el “padre maestro” por sus
conciudadanos. Fue prior del convento de Lucera y superior provincial.
Su vida se nutrió de la oración y de la
eucaristía, invocaba a Dios: “Sumo amor, inmenso amor, eterno
amor, infinito amor”. También tuvo una gran devoción a
María Inmaculada. Su celo brillo especialmente en la asistencia
a los encarcelados y condenados a los que acompañaba hasta el
lugar del suplicio. Se entregó de tal manera a los pobres, que
llegó a hacerse mendigo, ofreciendo a todos su ayuda cristiana.
Uno de sus contemporáneos dijo: “No perdonó ninguna
fatiga para salvar a las almas”.
Murió en su convento de Fasani, ofreciendo su enfermedad al
Señor con gran alegría. Murió con fama de
santidad, reconocida por el pueblo. San Juan Pablo II lo
canonizó el 13 de abril de 1986.