SANTOS BERARDO,
OTÓN, PEDRO, ACURSIO Y ADIUTO
16 de enero
1226 d.C.
Berardo de Corbio nació
en Corbio, junto a Pisa. Ingresó en los franciscanos en el 1213
y era sacerdote. Conocía la lengua árabe. Pedro de San
Jerónimo nació
en San Geminiano, donde oyó predicar a san Francisco en 211, y
decidió ingresar en la nueva Orden. Para algunos autores era
diácono y para otros sacerdote. Otón era también
sacerdote, Aiuto y Acursio eran hermanos legos.
Eran seis franciscanos enviados por san Francisco en 1219,
después del “Capítulo de las Esteras” a evangelizar a los
musulmanes occidentales del Al-Andalus, atravesaron: Aragón,
donde murió el jefe de la espedición, fray Vidal;
continuaron a Coimbra, donde fueron acogidos por doña Urraca, la
mujer del rey Alfonso II de Portugal. De ahí pasaron a Alenguer,
donde los acogió la infanta doña Sancha y recalaron en
Sevilla. Aquí llegaron vistiendo de seglar y fueron alojados en
casa de un mercader cristiano que intentó disuadirlos de que
predicaran en público, pero ellos se fueron a las puertas de la
mezquita y comenzaron con su predicación, los detuvieron y los
desterraron a Marruecos, donde prosiguieron su predicación, y
aquí los acogió el infante don Pedro de Portugal, que
intentó disuadirles de su predicación, pero fue vano su
intento, hasta que los encarcelaron en Marrakech y fueron decapitados.
Al enterarse san Francisco exclamó: “¡Ya tengo cinco
auténticos hermanos menores!”. El joven san Antonio de Padua,
presente en el traslado de sus reliquias a Coimbra, decidió
ingresar en la Orden franciscana. Fueron canonizados en 1481 por Sixto
IV. Patronos del Vicariato Apostólico de Rabat.