SAN ATILANO CRUZ
ALVARADO
1 de julio
1928 d.C.
Nació en Ahuetiche de Abajo, Jalisco en una familia de
ascendencia indígena, de la que recibió una buena
educación cristiana. Cuando tuvo la edad suficiente le
encargaron que cuidara el ganado. Más tarde lo llevaron sus
padres a Teocaltiche para que aprendiera a leer y a escribir. A los 17
años ingresó en el seminario auxiliar de Teocaltiche.
Después de dos años fue trasladado a Guadalajara. En toda
su carrera obtuvo, por su gran inteligencia, magnificas calificaciones
y varios premios. A la mitad de su carrera tuvo que interrumpir sus
estudios, porque el gobernador de Jalisco, desalojó del
seminario a todos los seminaristas, en 1924. Fue ordenado sacerdote
cuando serlo era el mayor crimen que podía cometer un mejicano,
y por ello lo hizo en la clandestinidad en 1927. El obispo lo
destinó a la parroquia de Cuquío como vicario, del padre
Justino Arona. En muy poco tiempo de su ministerio sacerdotal, un
año, trabajó en la pastoral con gran celo y entusiasmo.
Es el presbítero más joven de los 22 mártires
mejicanos que fueron canonizados por san Juan Pablo II el 21 de
mayo de 2000.