SAN ANTONIO PECHERSKY
7 de mayo
1073 d.C.
Nació el año de 983, en Lubeck, cerca de Chernigov. En su
juventud vivió algún tiempo en la soledad, según
el ejemplo de los anacoretas de Egipto. Pero pronto comprendió
que esa forma de vida, como cualquier otra, exigía cierta
preparación. Así pues, emprendió el viaje al Monte
Athos, donde practicó la vida eremítica con los monjes
del monasterio de Esfigmenu. Al cabo de algunos años, su abad le
mandó que regresase a su patria, a pesar de la repugnancia de
Antonio, diciéndole: "El Señor te ha fortalecido en el
camino de la santidad, y ahora te toca guiar a otros por ese camino.
Vuelve a tu patria, con la bendición del Monte Santo; ahí
serás padre de muchos monjes."
Antonio obedeció. Sin embargo, como no encontrase
paz ni soledad suficientes en los monasterios fundados por los
príncipes, se refugió en la cueva de un acantilado a
orillas del Dniéper, en Kiev. Se alimentaba de pan, verduras y
agua, cultivaba una parcela de tierra y pasaba el resto del tiempo en
oración. Algunas personas acudían a consultarle o a
pedirle su bendición; de cuando en cuando, le hacían
algún regalo, que el santo distribuía inmediatamente
entre los pobres. Algunos de esos visitantes acabaron por quedarse con
él. El primero fue el monje Nikon, que era sacerdote; a
éste siguieron otros aspirantes a la vida religiosa, los cuales
vivían en celdas excavadas en la roca. Ampliaron algunas cuevas
para instalar la capilla y el refectorio. Al contrario de otros abades
de la época, san Antonio aceptaba a todos los candidatos que
poseían las cualidades necesarias, ya fuesen ricos o pobres,
libres o esclavos. La comunidad creció tanto, que empezó
a faltar el sitio. Entonces, el príncipe Syaslav les
ofreció las tierras situadas en lo alto del acantilado, y
ahí construyeron los monjes un monasterio y una iglesia,
dedicados a la Dormición de la Santa Madre de Dios.
San Antonio confió pronto la dirección de la
comunidad a un monje llamado Barlaam. Después, para no verse
mezclado en las disensiones de los nobles de Kiev, se retiró a
Chernigov, donde fundó otro monasterio. Sin embargo, más
tarde volvió a Pecherskaya Lavra y ahí murió, en
su cueva, a los noventa años de edad.