SAN ANTONIO DAVELUY
30 de marzo
1866 d.C.
Antonio Daveluy nació
en 1818, en Amiens (Francia), en el seno de una familia influyente.
Recibió en su familia una esperada educación cristiana,
completada en el colegio jesuita de Saint Acheul. Hizo los estudios
sacerdotales en los seminarios de Saint Riquier, Issy-les-Moulineauz y
San Sulpicio de París, ordenándose en 1841. Destinado de
vicepárroco a Roye, maduró su vocación misionera y
con licencia de su obispo ingresó en el Instituto de Misiones
Extranjeras (1843).
Enviado a Macao,
aquí se unió al Vicario Apostólico,
monseñor Ferreol y con él entró en Corea. No le
sentaba bien el clima ni el tipo de alimentación pero
perseveró, sumándose a esto la persecución
anticristiana. Trabajó mucho y bien, y esto hizo que el
siguiente Vicario Apostólico, san Simeón Francisco
Berneux, lo eligiera para coadjutor suyo, siendo consagrado obispo con
el título de Akka en 1857. Decidida la partición pastoral
del vicariato, eligió la más peligrosa, viniendo ambos
obispos a morir mártires con unos días de diferencia, por
lo que por sucesión monseñor Daveluy fue Vicario
Apostólico de Corea.
Fue capturado en el
poblado de Keu-Tori en 1866 con su asistente, Lucas Hwang Sok-du . El
propio obispo se entregó a la policía cuando esta
llegó al pueblo, para evitar que fueran prendidos multitud de
cristianos. El 14 de marzo, junto con otros dos misioneros, los padres
Aumaitre y Huin, fueron enviados a la cárcel de Seúl. Los
misioneros fueron torturados e interrogados, y el obispo, que
podía hablar bien coreano, fue tratado con mayor severidad. Las
autoridades querían que dijera los nombres de los cristianos,
con cuyo fin fue cruelmente torturado, pero sin que el delatara a
ninguno y defendió la fe católica con elocuencia.
Como el rey se iba a casar,
se prefirió que el lugar de ejecución no fuera
Seúl, sino que una base naval en Su-Ryong, a unos 100
kilómetros de la ciudad. El obispo Daveluy fue decapitado el
viernes Santo de 1866, que aquel año cayó 30 de marzo,
junto con sus compañeros, el padre Aumaitre y el padre
Huin, y tres catequistas, Lucas Hwang Sok-tu, José Chang Chu-gi
y Tomás Son Cha-son.