SAN ANTELMO DE CHIGNIN
26 de junio
1178 d.C.
Noble que
nació en el castillo de Chignin (Saboya) que, fue ordenado
sacerdote muy joven. Primero fue prepósito y secretario de la
Iglesia de Ginebra, después canónigo y secretario del
obispo de Belley, cuando en el 1136, visitó casualmente la
cartuja de Portes, donde se quedó como monje en 1136, para pasar
luego pasar a la Gran Cartuja, donde, en calidad de procurador y
administrador de los bienes, se dedicó a la restauración
material y espiritual del monasterio.
En el 1139, fue elegido prior de la Gran Cartuja, y
gracias a sus esfuerzos, los cartujos que entonces eran una rama del
monacato benedictino, se trasformaron definitivamente en una nueva
Orden religiosa. Fue el primer general de los cartujos. Convocó
el primer capítulo general de los cartujos. Con la nueva
configuración, la Orden cartujana obtuvo un gran prestigio, pero
Antelmo tuvo que afrontar momentos difíciles, en particular con
las autoridades eclesiásticas, que le valieron la
dimisión de su cargo en 1151. Nombrado prior de Portes,
prosiguió con la reforma de la Orden y las obras de caridad con
los pobres. En 1154 volvió a la Gran Cartuja y estuvo a favor
del papa Alejandro III en su lucha contra el antipapa Víctor IV.
En el 1163, fue nombrado obispo de Belley, cargo que
aceptó por obediencia al Papa. Su condición de obispo no
le impidió retirarse, siempre que podía, a la soledad de
la cartuja. Como obispo reconstruyó la Grande Chartreuse
después de que gran parte del monasterio fuese destruido por una
avalancha. Además de restaurar los edificios, renovó las
tierras de cultivo y suministró agua corriente a través
de un sistema de acueductos. Fue enviado a Inglaterra para buscar la
reconciliación entre el rey Enrique II y santo Tomás
Becket, esto le trajo que el emperador Barbarroja, le concediese el
señorío feudal de Belley y el título de
príncipe del Imperio, lo que provocó la reacción
del conde Maurienne, el beato Humberto de Saboya, que vio mermado sus
derechos sobre la ciudad. Antelmo abdicó de su puesto de obispo
y se retiró a la Gran Cartuja. Se volcó tanto hacia su
pueblo que, después de su muerte, la ciudad fue llamada durante
un tiempo "Antelmópoli". Murió en la Gran Cartuja con la
dicha de ver rendido al conde. Patrón de Belley.