SAN ALBERTO HURTADO
CRUCHAGA
1952 s.C.
18 de agosto
Nació en Viña del Mar en Chile, en el seno de una modesta
familia. Huérfano de padre cuando tenía cuatro
años, creció junto a su madre y a su hermano Miguel en
casa de varios familiares en Santiago de Chile. Su madre
consiguió que consiguiera una beca en el colegio de San Ignacio.
Fue miembro de la Congregación Mariana. Desde los 15 años
quiso ser jesuita. Esto lo acercó al padre Fernando Vives s.j.,
que fue su director espiritual. Como no podía dejar a su madre
sola, estudió la carrera de Derecho en la Universidad
Católica. Mantuvo una intensa vida espiritual y
apostólica y se hizo militante del Partido Conservador. Por
circunstancias de la vida el futuro de su madre quedó asegurado
y se hizo jesuita. Ingresó en el noviciado en Chillan en 1923 y
en 1925, hizo sus votos en Córdoba, Argentina, donde
realizó el juniorado. Estudió Filosofía y el
primer año de Teología en Sarriá (Barcelona)
(1927-1931). La expulsión de los jesuitas durante la
República española motivó que fuera enviado a
Lovaina (Bélgica) en 1931, para continuar su formación.
Se doctoró en Pedagogía y terminó la
Teología y fue ordenado sacerdote en en 1933. Fue educador de
jóvenes y servidor de los pobres; promotor de vocaciones
sacerdotales y formador de laicos; fue un evangelizador y un luchador
social.
Después de once años, regresó a
Chile en 1936. Se dedicó a la enseñanza de
Pedagogía en la Universidad Católica y en el Seminario
Pontificio de Santiago (1936-1944) y, sobre todo, a trabajar con los
jóvenes en el colegio San Ignacio, donde les
enseñó a que “ser católicos significa ser
sociales”. Fue nombrado consiliario de la Acción Católica
chilena (1941-1944). En 1941, sacudió la conciencia nacional
chilena con un libro "¿Es Chile un país
católico?". Las circunstancias políticas y sociales de
Chile le obligaron a renunciar a su cargo en la Acción
Católica. Desde entonces se dedicó a trabajar sobre todo
en el campo social. En 1944, fundó el movimiento cristiano "El
Hogar de Cristo", con el fin de atender a hombres, mujeres,
adolescentes, niños desamparados, obra que actualmente es una de
las más importantes de Hispanoamérica. En 1947,
fundó la Acción Sindical Chilena (ASICH), donde se
formaban obreros para que lucharan por los derechos de clase y para
construir una sociedad más justa. En 1951, creó la
revista "Mensaje", para difundir la luz del Evangelio sobre temas
culturales, sociales y de actualidad; hoy en día sigue siendo un
punto de referencia importante de los medios de comunicación
como denuncia de las injusticias. Murió de un cáncer de
páncreas en Santiago de Chile, enfermedad que acogió con
alegría y gran espíritu religioso.
El Padre Hurtado fue beatificado por Juan Pablo II el 16
de octubre de 1994, y canonizado por SS Benedicto XVI el 23 de octubre
de 2005. El Parlamento chileno, ha decretado que el 18 de Agosto, fecha
de su muerte, sea el Día Nacional de la Solidaridad.