¿Por qué
los católicos obedecen a los sacerdotes, si los sacerdotes
fueron los que mataron a Cristo?
Los sacerdotes que mataron a Cristo, fueron los del Antiguo Testamento, según la Ley de Moisés, pertenecientes a la tribu de Leví. Mientras nuestros sacerdotes (obispos y presbíteros) son los continuadores de la obra de los apóstoles.
Ahora me dirijo a los presbíteros que hay entre ustedes; yo también soy presbítero y testigo de los sufrimientos de Cristo, con la esperanza de participar en la gloria que se va a manifestar (1Pe 5,1).
Te dejé en Creta para que acabaras de organizar lo que falta y pusieras presbíteros en todas las ciudades, de acuerdo a mis instrucciones (Tit 1,5).
¿Por qué los católicos confían en los sacerdotes, puesto que la Biblia prohíbe confiar en los hombres?
Maldito el hombre que confía en otro hombre (Jer 17,5).
Los católicos, al obedecer a los sacerdotes, confían en Cristo que estableció a los sacerdotes como sus representantes y les dio grandes poderes (Jn 20,23; Lc 22,19; Stgo 5,14, etc.).
Como el Padre
me envió a mí,
así Yo los envío a ustedes (Jn 20,21).
¿Por
qué no se casan los sacerdotes?
Los sacerdotes no se casan porque quieren imitar el ejemplo de Cristo, que no se casó y enseñó la superioridad del celibato con relación al matrimonio.
Hay hombres que nacen incapacitados para casarse. Hay otros que fueron mutilados por los hombres. Hay otros que por amor al Reino de los Cielos han descartado la posibilidad de casarse. ¡Entienda el que pueda! (Mt 19,12).
El mismo San Pablo no se casó y habló del celibato como forma de vida para ser más libres en el servicio de Dios.
Yo los quisiera ver lires de preocupaciones. El hombre que se queda sin casarse se preocupa de las cosas del Señor y de cómo agradar al Señor. Al contrario, el que está casado, se preocupa de las cosas del mundo y de agradar a su esposa, y está dividido (1Cor 7,32-33).
En
1Tim 3,2 y 12 se dice que el obispo y el diácono tienen que ser
casados. ¿Por qué esto no se hace en la Iglesia
Católica?
Aquí
no se exige que el obispo, o el diácono, sea casado sino que lo
haya sido solamente
una vez, en caso de ser casado.
En
efecto, al principio se escogían como obispos a hombres de
cierta edad, que generalmente eran casados. Pues bien, que no fueran
casados más de una vez.
Si
alguien, siendo pagano, se hubiera divorciado y se hubiera vuelto a
casar, no podía ser escogido para ser obispo. Lo mismo si un
cristiano enviudaba y se volvía a casar, no podía ser
elegido como obispo.
El
volverse a casar era considerado como falta de auténtica
fidelidad «hasta la muerte».
Por lo menos así interpretó la Iglesia esta parte de la
Biblia desde un principio, contando con obispos y diáconos
casados, y obispos y diáconos célibes.
¿Por
qué los sacerdotes cobran las misas, los bautizos y cualquier
otro servicio que prestan?
Lo que piden los sacerdotes por los servicios que prestan, no es un pago, sino una cooperación para su honesto sustento. En eso las sectas son más exigentes, al pedir el diezmo, la ofrenda y las primicias.
El obrero merece su salario (Lc 10,7).
Los que sirven al altar, ¿no reciben su parte del altar? Del mismo modo, el Señor ha ordenado a los que anuncian el Evangelio que vivan del Evangelio (1Cor 9, 1 3-14).
¿Por
qué las mujeres no reciben la ordenación sacerdotal?
Siguiendo el ejemplo de Jesús, que escogió como apóstoles a puros varones, en la Iglesia Católica pueden recibir la ordenación sacerdotal solamente los hombres y no las mujeres.