BEATO OTTO NEURURER
1940 d.C.
30 de mayo
Nació en Piller, Austria,
en el seno de una modesta familia de molineros. Ingresó en el seminario
menor de Bressanone y en 1907 fue ordenado sacerdote. Joven inteligente y
tímido, ejerció el ministerio sacerdotal con gran celo en las
diferentes parroquias donde fue destinado. En 1932 fue nombrado párroco
de la localidad tirolesa de Goetzens, ilustró dramáticamente
hasta que punto pudo llegar a la persecución de los nazis contra la
religión católica.
En 1936, el sacerdote fue detenido tras aconsejar a una de sus
feligresas que no se casara con un hombre divorciado, el cual resultó
ser amigo personal del “Gauleiter” o jerarca nazi de la provincia, a quien
lo denunció por “difamación del matrimonio germánico”.
Neurerer fue llevado primero a la cárcel de Innsbruck, de donde pasó
en 1939 al campo de concentración de Dachau y después al de
Buchenwald, Alemania. A pesar de todo ello se prodigó en el consuelo
y atención a los demás presos, compartiendo con ellos su escasa
comida.
Un preso le pidió el bautismo. Aunque él sospechó
que se trataba de una trampa, prefirió acceder a la petición
y exponerse. Delatado, fue trasladado al búnker y colgado cabeza abajo.
Se dedicó a orar mientras le llegaba la muerte. Es el primer sacerdote
católico muerto en un campo de concentración nazi. Su cuerpo
fue incinerado, aunque se conservan sus cenizas. Fue beatificado el 24 de
noviembre de 1996 por San Juan Pablo II.