BEATO MIGUEL MORANO SAEZ
1936 d.C.
31 de agosto
Fue bautizado al día
siguiente de su nacimiento en la Iglesia Parroquial de san Ginés de
la Jara de su ciudad natal. En 1909, para responder a su vocación
sacerdotal, ingresó en el Seminario de Almería y obtuvo muchas
distinciones por sus buenas notas.
Recibió el presbiterado el veinte de marzo de 1920, regresando
a Purchena para celebrar su primera Misa el cuatro de abril. Durante su primer
año de ministerio fue Coadjutor de Tabernas, sinedo nombrado Cura
Ecónomo de Partaloa al año siguiente. Entre 1922 y 1929 atendió
la Parroquia de santa María de Líjar.
Párroco de Nuestra Señora de la Encarnación
de Félix desde el cinco de mayo de 1929, allí consagraría
el resto de su ministerio. Una antigua colaboradora suya, doña Matilde
Flores, así lo recordaba: « Mi madre siempre decía: “este
hombre es un alma de Dios”. Daba catequesis y era un buen párroco.
»
La Persecución Religiosa lo sorprendió muy enfermo
de bronquitis y con cuarenta y un años. Detenido a finales de julio
de 1936 en la carretera del pueblo, sufrió cárcel en la ciudad
de Almería hasta su martirio. Una feligresa de entonces, doña
Ana Carretero, decía que: « Nos daba catequesis y buenos consejos.
La gente mayor decía que era muy bueno, y los niños lloramos
cuando nos dijeron que lo habían apresado en el barco y lo mataron.
»