BEATA MARGARITA POLE
28 de mayo
1541 d.C.
Margarita
Plantagenet era sobrina del Eduardo IV y de Ricardo III, era hija del
duque de Clarence. Se casó con sir Reginald Pole, con el que
tuvo cinco hijos; al quedarse viuda, fue nombrada condesa de Salisbury,
dama de Catalina de Aragón y aya de la princesa María,
hija de Enrique VIII. Pero la beata desaprobó abiertamente el
matrimonio de Enrique con Ana Bolena, lo cual le costó la
pérdida de su puesto en la corte y del favor del rey.
Cuando Sir Henry Neville se levantó en armas en el norte, el rey
envió a algunos emisarios a interrogar a Margarita, con la
esperanza de mezclarla en la conspiración; pero, aunque el
interrogatorio duró desde el mediodía hasta la noche, los
emisarios no consiguieron descubrir la menor huella de culpabilidad.
Cuando su hijo, el cardenal Pole (luego legado papal en el Concilio de
Trento), se opuso a la supremacía religiosa del rey y se
negó a regresar a Inglaterra, Enrique se vengó en su
madre, encerrándola durante dos años en la Torre de
Londres, donde en su ancianidad sufrió muchísimo.
Fue condenada a muerte por alta traición en un acto
en la que se la privaba de sus bienes y derechos civiles, y en la que
no tuvo juicio alguno. Como no existían pruebas para condenarla
en un juicio legal, el rey obligó al Parlamento a declararla
culpable de alta traición. El 28 de mayo de 1541, Margarita fue
conducida al patio de la Torre para ser decapitada. Lord Herbert cuenta
que se negó a arrodillarse y a reclinar la cabeza en el tronco
porque no se consideraba culpable de traición. El verdugo, que
carecía de práctica en el oficio, erró varias
veces el golpe. Según el relato del embajador francés,
Margarita no se negó a arrodillarse pero el verdugo principal se
hallaba ausente, y el substituto manejó el hacha con suma
torpeza. Por lo demás, casi todos los historiadores de peso
consideran muy poco probable la versión de Lord Herbert.
Margarita murió a los setenta años de edad. Es la
última Plantagenet de la historia. En la National Portrait
Gallery de Londres hay un interesante retrato de la beata. Varias
diócesis de Inglaterra celebran su fiesta. El 29 de
diciembre de 1886, el papa León XIII confirmó su culto.