LA SANTISIMA VIRGEN ES REINA
En
el mundo entero se repite con frecuencia y resuena en muchos corazones
el rezo de la Salve: Salve Regina...,Dios te salve Reina...Es el
reconocimiento y la proclamación de su realeza. Verdaderamente
María es Reina.
¿QUE ES UNA REINA?
El término reina (rey) deriva del verbo latino
regere, que significa ordenar las cosas a su propio fin. Por tanto, el
rey (reina) tiene el oficio de regir o gobernar a la sociedad a su
cargo para que éste alcance su fin, con un verdadero primado de
poder y excelencia.
El significado de la palabra rey (reina) tiene
múltiples acepciones. Así, por ejemplo:
a) Se puede ser reina de tres formas: la que es reina en sí
misma, la que es esposa del rey, y la que es madre del rey. En este
caso, María es reina por los dos últimos títulos:
por su relación con Dios y con Cristo.
b) También cabe considerar el reinado en diversos grados: El Rey
Supremo del Universo, el rey que domina sobre otros reyes (Rey de
reyes), y el rey de un reino determinado. En el primer sentido lo es
Dios, en el segundo Cristo y, en el tercero, cualquiera que lo reciba
por derecho de herencia, conquista o elección. Según
estas consideraciones, María es Reina de reinas y también
(en cierto modo) es reina por derecho de conquista.
c) Por último, también puede entenderse el término
reina (rey) en sentido metafórico. Así, se da éste
título a aquél o aquello que excede de un modo singular a
sus semejantes. Por ejemplo, se dice rey al león, a un
deportista, a la rosa reina de las flores, etc. En este sentido la
Vírgen María es Reina por su plenitud de gracia y la
excelencia de sus virtudes. En las letanías del Rosario la
llamamos: Reina de los Santos, de los Ángeles, de los
Mártires, de las Vírgenes, de los Confesores,etc.
LA REALEZA DE CRISTO Y DE MARIA
Entre Cristo y María hay un perfecto paralelismo
que es la razón fundamental de su realeza. Por este motivo la
Vírgen María es Reina: por su íntima
relación con la realeza de Cristo, pues éste lo es por
derecho propio y aquella lo es por razón de cierta
analogía.
De la unión con Cristo Rey deriva, en María
Reina, tan esplendorosa sublimidad, que supera la excelencia de todas
las cosas creadas; de esta misma unión nace su poder regio, por
el que Ella puede dispenar los tesoros del reino del Divino Redentor;
en fin, en la misma unión con Cristo tiene origen la eficacia
inagotable de su materna intercesión con su Hijo y con el Padre
(Pío XII, Encíclica Muystici corporis).
FUNDAMENTO TEOLOGICO DE LA REALEZA DE LA VIRGEN MARIA
La razón por la que la Santísima
Vírgen María es Reina se fundamenta teológicamente
en su divina Maternidad y en su función de ser Corredentora del
género humano.
a) Por su divina Maternidad: Es el fundamento principal, pues la eleva
a un grado altísimo de intimidad con el Padre celestial y la une
a su divino Hijo, que es Rey universal por derecho propio.
b) Por ser Corredentora del género humano: La Vírgen
María, por voluntad expresa de Dios, tuvo parte
excelentísima en la obra de nuestra Redención. Por ello,
puede afirmarse que el género humano sujeto a la muerte por
causa de una virgen (Eva), se salva también por medio de una
Vírgen (María). En consecuencia, así como Cristo
es Rey por título de conquista, al precio de su Sangre,
también María es Reina al precio de su compasión
dolorosa junto a la Cruz.
NATURALEZA DEL REINO DE MARIA
El reino de Santa María, a semejanza y en perfecta
coincidencia con el reino de Jesucristo, no es un reino temporal y
terreno, sino más bien un reino eterno y uninersal: "Reino de
verdad y de vida, de santidad, de gracia, de amor y de paz" (Prefacio
de la Misa de Cristo Rey).
a) Es un reino eterno porque existirá siempre y no tendrá
fin (Lucas 1,33) y, es universal porque se extiende al Cielo, a la
tierra y a los abismos (Filipenses 2,10-11).
b) Es un reino de verdad y de vida. Para esto vino Jesús al
mundo, para dar testimonio de la verdad (Juan 18,37) y para dar la vida
sobrenatural a los hombres.
c) Es un reino de santidad y justicia porque María, la llena de
gracia, nos alcanza las gracias de su Hijo para que seamos santos (Juan
1,12-14); y de justicia porque premia las buenas obras de todos
(Romanos 2,5-6).
d) Es un reino de amor porque de su eximia caridad nos ama con
corazón maternal como hijos cuyos y hermanos de su Hijo (1
Corintios 13,8).
e) Es un reino de paz, nunca de odios y rencores; de la paz con que se
llenan los corazones que reciben las gracias de Dios (Isaías
9,6).
Santa María como Reina del Rey es coronada en sus
imágenes (según costumbre de la Iglesia) para simbolizar
por este modo el dominio y poder que tiene sobre todos los
súbditos de su reino.
"La Vírgen Inmaculada...asunta en cuerpo y alma a
la gloria celestial fue ensalzada por el Señor como Reina
universal, con el finde que se asemejase de forma más plena a su
Hijo, Señor de señores y vencedor del pecado y de la
muerte" (Concilio Vaticano II, Contitución dogmática
Lumen gentium,n.59).