LA PRESENTACIÓN
DE LA VIRGEN MARÍA
21 de noviembre
Esta festividad ya
celebraba en Chipre en el siglo IX, fue introducida en el misal romano
en 1472. La memoria hace mención de un particular de la leyenda
relatada por el “Protoevangelio de Santiago” (s. II), según la
cual María, llevada al templo a los tres años por sus
padres, habría subido una escalera de varios peldaños (el
número era de tres, ampliado posteriormente hasta quince), sin
volverse luego atrás.
En realidad, la
memoria celebra la entrada de María en el templo de
Jerusalén según la expresión del oficio bizantino
actual ("eisodos"), en relación con la dedicación de la
basílica de Santa María la Nueva, el 21 de Noviembre del
543.
En la memoria actual está en consonancia con las palabras de San
Agustín: "Por eso es más importante su condición
de discípula de Cristo que la de madre de Cristo, es más
dichosa por ser discípula de Cristo que por ser madre de Cristo.
Por esto María fue bienaventurada, porque antes de dar a luz a
su maestro, lo llevó en su seno". ...María es dichosa
también porque escuchó la palabra de Dios y la
cumplió; llevó en su seno el cuerpo de Cristo, pero
más aún guardó en su mente la verdad de Cristo".