BEATO JUAN SANCHEZ MOLINA
1936 d.C.
28 de agosto
Bautizado en la Iglesia Parroquial
de Nuestra Señora del Rosario de su pueblo, su piedad lo llevó
al Seminario de san Indalecio de Almería en 1897. Fue ordenado presbítero
el cuatro de junio de 1909 en la capilla del Palacio Episcopal almeriense.
Fue enviado a la coadjutoría de Gérgal, colaborando
activamente en el Sínodo Diocesano de 1929. En 1935 fue nombrado Capellán
de las Hermanitas de los Pobres y de la Prisión Provincial de Almería.
Su amigo don José Campoy Gil cuenta que: « Era un hombre de
carácter muy campechano, sencillo, lleno de bondad. Un sacerdote de
mucha fe, muy contento de su vocación, caritativo, se veía
un hombre piadoso y con gran fortaleza. » Tenía cincuenta y
cuatro años al inicio de la Persecución Religiosa. Detenido
muy pronto, los laicistas de Rioja impidieron su liberación. Sufrió
prisión en Almería y, luego, en el barco Astoy Mendi.
Don Manuel Román González « El día
veintiocho de agosto, el siervo de Dios y el superior de los Padres Jesuitas,
padre Martín Santaella, fueron llevados al acorazado Jaime I y allí
encontraron el siniestro lugar del sacrificio. Se dijo que incluso fueron
lanzados a las calderas. Fallecieron en el mismo buque. Se supo que ante
una muerte atroz y violenta, dieron ejemplo de entereza y tuvieron heroica
muerte. Las virtudes sacerdotales del siervo de Dios tuvieron el final de
un martirio impresionante en las calderas de dicho acorazado Jaime I. »