BEATO JUAN MARTINEZ
15 de febrero
1611 d.C.
En Praga, en el Reino de Bohemia, beatos Federico
Bachstein, Juan Martínez, Bartolomé Dalmasono, Simón,
sacerdotes; Jerónimo dei Conti Arese, diácono; Gaspar Bodeo,
subdiácono; Cristóbal Zelt, Juan Didak, Manuel, Juan Bodeo,
profesos; Santiago y Clemente, con votos temporales; Juan y Antonio, novicios,
todos de la Orden de los Hermanos Menores de San Francisco, de distintas
nacionalidades, que dieron su vida por la fe en el convento de Santa María
de las Nieves.
Los
catorce frailes del convento de Nuestra Señora de las Nieves en Praga,
procedentes de Italia, Bohemia, España, Francia y Alemania, fueron
víctimas de la inestable situación política en el Reino
Checo, pagaron con la propia sangre su firmeza en la propia fe. La convicción
de que murieron como mártires era evidente para las personas que les
conocieron.
El
martirio de los 14 franciscanos se inserta en la lucha entre protestantes
y católicos. Rodolfo II, rey de Bohemia y emperador, concedió
en 1609 la libertad religiosa a las confesiones no católicas presentes
en Bohemia, pero se agudizó el conflicto entre partidarios de las
diversas confesiones. Detrás estaban intereses de otro tipo relacionados
con el acceso al trono.
La
inmensa mayoría de la población de Praga en esa época
era protestante y los franciscanos fueron acusados de haber colaborado con
la tropas invasoras de Leopoldo V de Hasburgo, obispo de la ciudad bávara
de Passau (actual Alemania), que había invadido Praga.
El 15 de
febrero de 1611 una multitud de husitas, calvinistas, luteranos y algunos
católicos irrumpió en el convento franciscano de Praga. En
tan sólo cuatro horas (de las 11 a las 15) fueron masacrados 14 frailes,
empezando por el vicario del monasterio Frederick Bachstein, que fue traspasado
por una lanza en el corazón.
Las
crónicas de la época indican que se trató de una agresión
sin precedentes, puesto que habrían desnudado, descuartizado y expuesto
los cuerpos mutilados de los religiosos durante cuatro días ante la
Iglesia de la Virgen de las Nieves.
Dos
pías mujeres de la aristocracia, Dña. María Maximiliana,
mujer del Conde Adán de Sternberg, y Dña. Ana, viuda del Vicecanciller
Juan Enrique de Pisnice, junto a dos ciudadanos de Praga, envolvieron a escondidas
los cadáveres de los mártires en sábanas blancas y los
enterraron cerca del convento.
Muchos
de los asesinos murieron después de hambre y de peste. El Archiduque
Matías, a causa de este ejemplo martirial de los reformados, fue elegido
rey de Bohemia el conflicto político-religioso se hizo más
áspero. La lucha etre las partes concluyó con la batalla de
la Montaña Blanca (1620), guiada por el nuevo emperador Fernando II,
que marcó el refuerzo de las fuerzas católicas y la derrota
definitiva del frente protestante de las tierras de Bohemia.
La
muerte de los religiosos se enmarca dentro de los conflictos religiosos que
asolaron Europa durante esa época y que desembocaron en la sangrienta
Guerra de los Treinta Años (1618-1648).
Padre Juan Martínez.
Nació en La Coruña (España) hacia 1571. Sacerdote franciscano.
Era sacristán del convento de Nuestra Señora de las Nieves
de Praga y confesor de los españoles que habitaban la ciudad. Era
un docto polemista. Cuando el 15 de Febrero de 1611 la muchedumbre
irrumpió la iglesia del convento, como sacristán buscó
esconder el Santísimo y por esto le cortaron la mano derecha y la
cabeza.