VENERABLE JUAN
BAUTISTA RUBINO
1853 d.C.
11 de septiembre
Giovanni Battista Rubino nació en La Morra, en la
provincia de Cuneo, 12 de febrero de 1776. Asistió a las
escuelas antes de la ciudad cuyo padre fue alcalde y luego en el
Colegio Real de Alba. En Alba ingresó en el seminario, pero sus
estudios fueron interrumpidos varias veces. Vivió hora demasiado
dolorosa de dominio napoleónico en Italia, lo que llevó a
la persecución contra la Iglesia y el arresto del Papa
Pío VII, lo que resulta en un resbalón momentánea
del clero y de los fieles. En este contexto, a causa de los
revolucionarios franceses en el seminario fue cerrado por cinco veces,
pero aun en medio de las muchas pruebas de Ruby podría ordenado
sacerdote 09 de marzo 1799.
Equipado con fe sólida y profunda, el nuevo sacerdote
formó un punto de referencia sólido para muchos en este
período de degradación moral y espiritual. Se
dedicó sobre todo a la formación de los
jóvenes.Sintiendo la necesidad de la acción directa,
tomó el campo al lado del Venerable Pío Bruno Lanteri,
con quien trabajó por la liberación del Papa Pío
VII, prisionero de los franceses, y trajo la ayuda en Liguria.Los dos
sacerdotes santos Piamonte también se convirtieron en activo
para la reanimación del clero, frenar y la lucha contra las
ideas heréticas rampantes en ese momento.
En 1814, volvió la paz, mientras que el Congreso de
Viena estableció un nuevo orden político de las naciones
europeas devastadas por años de revoluciones, Don Rubino
regresó a su ciudad natal para continuar su misión.
Maestro enseña en las escuelas, el sacerdote llevó las
almas por los caminos de Dios. Intención también para
fundar una orden de monjas que tiene el único propósito
de la oración continua por la paz, en 1815 fundó las
Hermanas Oblatas de San Luis Gonzaga, con el objetivo particular de la
educación la juventud abandonada, sanar a los enfermos y para
obtener de Dios a través de sus obras y sacrificios por la paz
para todos los pueblos, todas en plena obediencia a la Iglesia y en
comunión con el Papa, los obispos y párrocos.
A lo largo de su vida siempre tuvo gran influencia en
él la relación espiritual de profunda amistad con el
Padre Pío Bruno Lanteri, fundador de los Oblatos de la Virgen
María y también natural de la denominada "Provincia
Granda". Giovanni Battista Rubino murió en su país natal
el 11 de febrero de 1853, sin que se pueda imaginar, sin duda que su
obra se extendería, aunque en su pequeñez, fuera de la
diócesis de Alba e incluso del extranjero. Pero las dos cosas
eran ciertas, así como también se indica en la imagen
sagrada en su memoria: "más papista que el ideal es promover la
gloria de Dios a través de la salvación de las almas y
ese mínimo está siendo atrae sobre sí la sonrisa
de ' Todopoderoso. Sus restos mortales fueron trasladados en 1953 en la
casa de Luigine en La Morra. El Papa Juan Pablo II lo declaró
"venerable" 13 de junio 1992.