BEATO JOSÉ
IMBERT
9 de junio
1794 d.C.
Nació en Marsella. Fue sacerdote profeso jesuita, y fue
destinado a la enseñanza y desempeñó su tarea
docente, sucesivamente, en los colegios jesuitas de
Chalon-sur-Saóne, Besançon y Grenoble, donde estaba
cuando en 1762 fue suprimida la Compañía de Jesús.
Entonces ejerció su ministerio al servicio de la diócesis
de Moulins. Al inicio de la Revolución, cuando todos los obispos
legítimos habían sido expulsados de Francia, el Papa
Pío VI lo nombró como vicario apostólico de la
iglesia local y su territorio. Los verdaderos fieles se unieron a
él, pero el cargo no podía menos que atraerle el odio de
los revolucionarios.
Arrestado y encarcelado, consta su presencia en la
cárcel de Moulins en julio de 1793. De allí, con otros
ochenta eclesiásticos del departamento de l'Allter, fue llevado
a Limoges ya de camino hacia la deportación. Aquí
hubieron de presenciar la ejecución de un sacerdote. Luego, en
Saintes, él compuso una letra misionera para la música de
«La marsellesa». Llegado a Rochefort, fue embarcado en el
barco “Les Deux Assonés”, luego de haber sido cacheado y
despojado de sus pertenencias. Dio gran ejemplo de piedad, mansedumbre,
caridad y celo por sus hermanos sacerdotes, y murió de una
enfermedad incurable el 9 de junio de 1794, siendo enterrado en la isla
de Aix. Fue beatificado por San Juan Pablo II el 1 de octubre de
1995.