BEATO JOSÉ DE
CALASANZ MARQUÉS
29 de julio
1936 d.C.
Nació en Azanuy, Huesca. Se convirtió en salesiano en
1890 y en sacerdotes cinco años más tarde. Fue secretario
del beato Don Felipe Rinaldi durante diez años, se le
encargó después de la dirección del Colegio de La
Esmeralda en las Corts de Sarriá. Dejó esta Casa en 1916
para dirigir la de Camagüey (Cuba), de donde pasó a ser
Provincial de la Inspectoría Boliviano-Peruana. En 1925
regresó a España para convertirse en Provincial de
Terraconense (Barcelona - Valencia). Era un hombre de gran
corazón y muy trabajador, desde el inicio interesado en la
salvación de sus cofrades. Sereno mientras la persecución
arreciaba, así habló a un Hermano que le exponía
sus temores: “—Hijo mío, debemos tener más confianza en
la Divina Providencia. De todos modos, creo que estoy en gracia de
Dios”.
Fue capturado junto con otros salesianos mientras llevaba a cabo un
Retiro en Valencia. Habiendo pasado con los demás salesianos una
semana en la cárcel de Valencia, fue detenido por unos
milicianos de Mislata, que al ver la sotana en su maletín, le
preguntaron si era cura: “—Sí, soy sacerdote salesiano”,
respondió con calma y dignidad. Fue conducido de pie en un
camión hacia Valencia, y al llegar al Puente de San José,
el disparo de un fusil que llevaba un mozalbete, desobediente a quien
le indicaba el peligro anejo a la forma de llevar el arma, acabó
con su vida. Los dos salesianos que le acompañaron fueron
testigos de su inmolación, consecuencia del odio al sacerdote.
Era el 29 de julio de 1936.