BEATO GREGORIO FACI
MOLINS
1936 d.C.
8 de octubre
El
niño Gregorio vino al mundo en La Codoñera (Teruel) el 2
de marzo de 1908. Sus padres trabajaban como jornaleros en aquellas
duras tierras de secano. Ingresa en el seminario marista de Vic
(Barcelona) en 1919. Cuatro años después emite los
primeros votos. El 15 de agosto de 1929 hace la profesión
perpetua.
Desempeñó su labor apostólica en
Cartagena, 1925; Alicante, 1929; Valencia, 1929; Girona, 1931;
Mataró (Valldemía), 1933; Sabadell, 1935. José
Carmelo era un alma de Dios. En él se transparentaba una
esmerada formación cristiana, tesoro que le transmitieron sus
padres. Se distinguía por su inocencia y carácter
sencillo, era delicado de trato, amable, piadoso y cumplidor de sus
deberes. Era un hombre callado, sencillo, sin presunción, que
buscaba más bien eclipsarse y vivir en silencio.
Tenía una afición especial por el
violín. Constituía su distracción favorita, su
pasatiempo ideal, aunque en aquellos tiempos no se podía aspirar
a mucho más en cuanto a perfeccionamiento musical.
El día 18 de julio de 1936 el hermano José
Carmelo se encontraba en Sabadell. La ciudad se revolucionó. El
colegio ardió por los cuatro costados. Los nueve hermanos
tuvieron que huir. Cada uno tuvo su odisea. El hermano Fausto,
director, y el hermano José Carmelo fueron martirizados en
distintas fechas. Nuestro hermano acudió al buque Cabo San
Agustín, y después fue llevado a la checa de San
Elías, de donde salió para ser fusilado con los otros 45
hermanos maristas. Sus restos mortales descansan en la iglesia
del monasterio de Santa María de Bellpuig de Les Avellanes
(Lleida).