BEATO FLORIANO STEPNIAK
12 de agosto
1942 d.C.
En Dachau
cerca de Munich en Alemania, beatos Floriano Stepniak, de la Orden de
los Frailes Menores Capuchinos, y José Straszewski, sacerdotes y
mártires, que, en el tiempo de la invasión de Polonia
durante la guerra, murieron en el campo de concentración en una
cámara de gas.
José (Floriano) nació en Zdzary, en el seno
de una familia campesina. Aunque no poseía gran capacidad
intelectual, supo siempre suplir esa carencia con la diligencia y la
laboriosidad. El 14 de agosto de 1931 ingresó en el noviciado
capuchino de Nowe Miasto, recibiendo el nombre religioso de Floriano.
Continuó los estudios teológicos en Lublin y
recibió la ordenación sacerdotal el 24 de junio de 1938.
A continuación siguió con estudios de Sagrada Escritura
en la Universidad Católica del mismo Lublin y allí se
encontraba al estallar la Guerra el 1 septiembre 1939.
No pudo trabajar mucho tiempo en Lublin. El 25 de enero de
1940, junto con todos los sacerdotes y clérigos del convento,
fue arrestado por la Gestapo y encarcelado en el Castillo de la ciudad.
El padre Enrique no perdió entonces el optimismo y la
alegría que le eran innatos. El 18 de junio de 1940, al igual
que los demás compañeros religiosos, fue trasladado al
campo de concentración de Sachsenhausen, junto a Berlín.
Tampoco allí perdió su buen humor, por más que la
vida del campamento fuera espantosa. El 14 de diciembre de 1940 fue
transferido al campo de concentración de Dachau, donde le
asignaron el número de matrícula 22.7388.
El frío le afectó terriblemente hasta minar
su organismo. Era hombre de constitución fuerte y robusta, por
lo que necesitaba mucho alimento. A la debilidad del hambre se le
unió la enfermedad. En el verano de 1942 enfermó y tuvo
que ser hospitalizado en la enfermería del campo. En aquel
periodo todos los inútiles para el trabajo y los enfermos eran
instalados a un barracón donde las condiciones eran menos malas.
Allá fue trasladado el padre Floriano. Después de algunas
semanas, aunque las raciones de comida eran de hambre, mejoró y
fue dado de alta. Pero no fue devuelto a su bloque. Como convaleciente
lo pusieron en el bloque para los inválidos en el campo de
concentración de Linz, Austria.
Cuando llegó la vez a la letra "S" (el apellido era
Stepniak), el padre Florián fue llevado a la muerte. El gas lo
asfixió. Su cuerpo, con toda probabilidad, fue quemado en los
hornos. Las autoridades del campo, hipócritamente, comunicaron a
sus padres que su hijo José había muerto de una angina de
pecho.