BEATO FERNANDO VIETO DE VALERA
1 de noviembre
Misionero del convento mercedario
de Santa María en Panamá, el beato Ferdinando Nieto de Valera,
trabajó con todas sus fuerzas para llevar la palabra de Cristo, atado
al cuello con una cuerda por herejes y suspendido de un árbol, fue
liberado milagrosamente de ángeles. En defensa de las cosas sagradas
que no fueron despreciadas, fue nuevamente condenado a muerte, pero no obstante,
no fue un mártir y se defendió valientemente hasta el final.
La fe católica llena de méritos murió como confesor.