BEATO EUQUERIO
LLANILLO GARCÍA
4 de enero
1937 d.C.
Nació en Solanas de Valdelucio (Burgos, España); su padre
era maestro. En 1924, Euquerio ingresó en el seminario marista
de Arceniega (Álava); pasó al noviciado de Las Avellanas
(Lérida), en 1924. Allí vistió el hábito
marista conservando en religión el nombre
recibido en el bautismo. El 8 de septiembre de 1935 hizo la
profesión perpetua en Las Avellanas.
Terminado el
noviciado, continuó en las Avellanas realizando estudios de
magisterio. En agosto de 1931, fue destinado a Madrid, al colegio
marista de la calle Cisne, n.º 3, donde permaneció hasta el
26 de julio de 1936, día en el que el colegio sufrió el
primer registro y fue expulsada la comunidad.
Su personalidad
ejercía un fuerte atractivo sobre sus alumnos y sobre las
personas con las que se relacionaba. No le gustaba imponerse a nadie ni
era excesivamente audaz, pero influía en los demás desde
su delicadeza en el obrar y con la gran alegría que lo
desbordaba. Acompañaba todo esto con una especie de dulzura que
atraía a la gente.
Se refugió en la Fonda Algorta de Madrid, en la que fue apresado
el 30 de agosto. Trasladado al colegio de los escolapios de la calle
General Porlier, convertido en cárcel, sufrió
interrogatorios, fríos, humedades y malos tratos, lo que hizo
que enfermara. Por Navidad se agravó; perdía el
conocimiento y deliraba. Su hermano José, preso con él,
lo cuenta así: “Faltos de toda asistencia humana, pero no
divina, pudimos afrontar tanta hostilidad, como buenos religiosos.
Empecé una novena a Marcelino Champagnat, pidiendo su
curación y, al noveno día, el 4 de enero de 1937,
murió mi hermano. En estos días tuvo intervalos en los
que parecía reconocerme y me llamaba por mi nombre. Otras veces,
se le oía rezar con gran devoción el
avemaría: ponía énfasis en el santa
María”. Fue beatificado por el Papa Francisco el 13 de octubre
de 2013.