BEATO DAMIÁN DE
HAGI
1605 d.C.
19 de agosto
Catequista,
que murió mártir en Yamaguchi (Japón) con cerca de
45 años. El catequista ciego Damián muere también
decapitado, de rodillas y orando, por defender y propagar la fe. Su
cuerpo fue mutilado y arrojado al río por los verdugos, con la
intención de hacer desaparecer los restos, de donde los
cristianos rescataron la cabeza para enviarla a Nagasaki. Los
perseguidores intentaban conseguir la apostasía. Hay que notar
en este caso y en algunos otros, la acción persecutoria de
algunos bonzos de una secta budista, que instigaron a los gobernantes.
Este catequista ciego, que se había convertido del
budismo, dedicó su vida a la catequesis, con su arte musical y
narrativo, llegando a convertir, sólo en un año, a ciento
veinte personas, además de dedicarse durante años a
fortalecer la fe de los ya cristianos. Con sus cantos y narraciones, el
ciego "iluminaba" a todos por el camino de la fe. En el momento en que
iba a ser decapitado, le conminaron por tres veces a que apostatara de
la fe, pero Damián ofreció su cuello mostrando gran paz y
alegría. Sus restos, recuperados por los cristianos, fueron
trasladados a Nagasaki y luego a Macao.