CORAZÓN
Vocabulario bíblico
Como órgano físico
apenas esmencionado por la Biblia (2 Sm 18, 14). En cambio lo es con muchísima
frecuencia en sentido figurado para designar la realidad más profunda
del hombre en todas sus manifestaciones y facetas: el primer lugar el ser
humano en su totalidad, en su personalidad más íntima (Dt 6,
5; Lc 8, 15); después las intenciones y proyectos del hombres, sus
pensamientos y deseos, sus sentimientos y emociones (Sal 16, 9; 2 Cor 2,
4).
Con frecuencia, pues, "corazón" según los semitas
es sinónimo de mente (Is 10, 7), de conciencia (1 Cor 4, 5), de sabiduría
(Ef 1, 18), de voluntad (Rom 10, 9-10). Por esta razón no debemos
extrañarnos de que también el Nuevo Testamento sitúe
en el corazón la nueva vida recibida de Cristo y del Espíritu
(Gal 4,6; Ef 3, 17).