CONSAGRACIÓN
Vocabulario bíblico
Es el rito o acción
simbólica mediante los cuales se vincula de manera especial una persona
o una cosa con Dios (Ex 28, 41; Mt 28, 19). Las personas o cosas consagradas
adquieren un valor y una dignidad especial y deben ser particularmente respetadas.
En el Antiguo Testamento son objeto de consagración los sacerdotes,
los profetas y los reyes. La expresión "consagrar al exterminio",
muy utilizada en la historia deuteronomista, significa que una personas o
una cosa es totalmente destruida como señal de homenjae a Dios, dueño
de todo (Josué 6, 21; 8; 26).
Como el rito de consagración se realizaba habitualmente
mediante la unción con aceite, consagrar y ungir, consagrado y ungido
vienen a ser términos equivalentes. El ungido (consagrado) por
excelencia es el Mesías=Cristo (Sal 2,2), título que el Nuevo
Testamento no duda en atribuir a Jesús de Nazaret (Lucas 2, 11; Mc
1,1; 8, 30). A partir de Jesucristo -el Consagrado, el Cristo- todo cristiano,
en cuanto vinculado a Cristo por el Bautismo, es también un consagrado
(Mt 28, 19; 2 Cor 1, 21).