Nació
en Quintanar del Pino (Burgos) en el seno de una familia humilde. Tras
estudiar en el seminario de Burgo de Osma, fue ordenado sacerdote en
1858. En 1862 se trasladó a Cuba, como secretario del arzobispo
Primo Calvo y Lope, un burgalés, que había sido nombrado
arzobispo de Santiago de Cuba. Con ancianos desprotegidos, niños
y niñas abandonados llevó a cabo una labor asistencial y
de cuidado por la que se ganó el apodo de "padre de los pobres".
Es entonces cuando funda las Hermanas de la Caridad para la asistencia
de los pobres marginados.
Se niega a
reconocer como arzobispo al nombrado por el gobierno y no confirmado
por el papa (1872) y es encarcelado casi durante dos años. En
1876 fue nombrado obispo auxiliar de Toledo (en el tiempo en el que los
obispos residían en Madrid). En 1882 fue nombrado obispo
residencial de Ávila y en 1886 elegido para la sede episcopal de
Madrid-Alcalá. Siendo obispo de esta diócesis, en 1888
convoca el primer Congreso Católico Nacional. León XIII
le nombró arzobispo de Valencia en 1892. Dicha diócesis
estaba vacante porque Antolín Monescillo había sido
promovido a Arzobispo de Toledo. En 1894 el Papa lo creó
cardenal del título de San Pietro in Montorio. En 1898 fue
nombrado Arzobispo Primado de Toledo y Patriarca de las Indias.
Cuidó
especialmente la formación de los sacerdotes. Impulsó y
creo asociaciones e instituciones religiosas produciendo una gran
renovación. Llevó a cabo una intensa labor pastoral y
social entre los más necesitados, en tiempos de especial
dificultad política. A él se le atribuye también
los primeros movimientos encaminados a la unidad de los
católicos. Fue Senador en las legislaturas 1887-88 (por derecho
como arzobispo de Toledo) y 1893-94 (por derecho propio).
Falleció en Toledo y fue enterrado en la catedral de la ciudad.
En su tumba de bronce, que recibe flores a diario, figura el siguiente
epitafio: "vivió pobre y pobrísimamente
murió". Fue beatificado por Benedicto XVI el 18 de octubre
de 2009.