BEATO CECILIO VEGA
DOMINGUEZ
24 de julio
1936 d.C.
En Pozuelo
de Alarcón, Madrid, España, Beatos Juan
Antonio Pérez Mayo, Francisco Polvorinos Gómez, Manuel
Gutiérrez
Martín, Cecilio Vega Domínguez, Juan Pedro Cotillo
Fernández, Justo
González Lorente, Pascual Aláez Medina, sacerdotes
profesos de los
Misioneros Oblatos de María Inmaculada, y Cándido
Castán San José,
laico, casado, muertos en tiempos de la Guerra Civil por defender el
nombre de Cristo.
Cecilio Vega Domínguez nació
en 1913 en Villamor de Órbigo (León) en el seno de una
familia de humildes labradores que vivían del trabajo en el
campo. Cecilio comenzó el noviciado como Misionero oblato en
1930. El día 15 del año siguiente hace su primera
oblación y pasa a Pozuelo para cursar los estudios
eclesiásticos. En 1934 hace su Oblación perpetua y se
inicia en las órdenes menores (actuales ministerios). Era
subdiácono y estaba ya a las puertas del diaconado y del
sacerdocio.
A lo largo de su corta vida, se destaca en Cecilio
su constancia y tesón ante las dificultades que iba encontrando
en los estudios, entre otras causas, por un accidente desafortunado en
el trabajo agrícola, que le ocasionó la pérdida de
un ojo. Hombre de buen corazón, dócil, noble, piadoso y
franco. De buen espíritu en la convivencia con los demás.
También él, al igual que Manuel
Gutiérrez, tras dos días de incertidumbre, ansiedad y
vejaciones en su propio convento, es “sacado” de
su propio domicilio en la noche del 24 de julio de 1936 y fusilado de
madrugada en la Casa de Campo.