BEATA BRONISLAVA
1259 d.C.
29 de agosto
Nació en Kamien, Silesia (Polonia), en el seno de la noble
familia de Odrowaz. Hija de la princesa polaca Ana Saxa Gryff. Prima de
san Jacinto de Cracovia. A los 16 años, siguiendo la voz de Dios
y los consejos de san Jacinto, ingresó en el monasterio
premostratense de Zwierzyniec en Cracovia, donde en poco tiempo, fue
modelo de vida religiosa. Para poder meditar con mayor fervor los
misterios de la Pasión de Cristo, subía a la colina de
Sikornik, no lejos del monasterio, y que hoy se llama colina de Santa
Bronislawa.
Se dice que cuando murió San Jacinto, tuvo la
visión en la que se veía al santo obispo conducido al
Cielo por María y los ángeles. Después de vivir 40
años entre el trabajo monástico y la oración,
Bronislawa murió. Sus restos fueron enterrados en la iglesia del
monasterio, donde permanecieron olvidados por mucho tiempo; en 1612 se
encontraron de nuevo, y colocados en el altar de Santa Ana, llamado
más tarde de San Jacinto.
Por instancia de la Orden Premostratense, Gregorio XVI
concedió, con decreto del 31 de agosto de 1839, que Bronislava
fuese públicamente venerada en la diócesis de Cracovia.
Pío IX, con decreto del 7 de diciembre de 1859. extendió
la conseción a la diócesis de Wroclaw (Breslavia), y
León XIII a toda la Orden de los Premostratenses.