BEATA BLANCA DE
ARAGÓN
12 de noviembre
Esposa del
rey Jaime II de Aragón. Era una reina de extrema caridad y
misericordia. A la muerte de su marido llevó el
hábito mercedario y vivía como monja sencilla entre los
otros religiosos. Asidua en la oración, llena de elogios y
méritos, migró devotamente al Señor.